Rotundo fracaso de la cumbre que iba a salvar el mundo

Estaba cantado. Lo que mal empieza, mal acaba. La cumbre por la farsa del cambio climático acaba como empieza: siendo una farsa. Y lo que es más preocupante es que todavía haya gente que crea en esa sarta de mentiras...

El país organizador de la cumbre que pensaba salvar al mundo del cambio climático ha tirado la toalla. Según informa el diario Berlingske Tidende, renuncia a alcanzar un acuerdo mundial, tras los sucesivos días de caos en las negociaciones.

Según estas informaciones los 120 jefes de Estado y de Gobierno que esperan en Copenhague firmarán únicamente una declaración final no vinculante. El negociador jefe de la delegación china, Su Wei , dijo el miércoles que su país no contaba ya con alcanzar un acuerdo, y sus pronósticos parecen certeros.

Según publica El Mundo, fuentes de la delegación danesa declararon que todos los intentos por alcanzar compromisos estaban fracasados. Incluso la Unión Europea ve con pesimismo las negociaciones para un acuerdo, atascadas aún en "cuestiones de procedimiento".

Las negociaciones efectuadas esta madrugada por la presidencia danesa no han obtenido los frutos esperados, de ahí que se haya descartado poner sobre la mesa una nueva propuesta en las próximas horas, como inicialmente se había anunciado.

Cuatro de los principales países emergentes -China, India, Brasil y Sudáfrica- están insatisfechos con la forma en que Dinamarca ha llevado el proceso y se niegan a apoyar el texto danés, que debería servir de base para seguir negociando, señalaron fuentes de la delegación danesa a Ritzau.

La decisión de la presidencia danesa no implica que el primer ministro, Lars Løkke Rasmussen, haya descartado la posibilidad de un acuerdo y puede ser interpretada como un movimiento táctico para abrir el camino a que los jefes de Estado y de Gobierno asuman la responsabilidad y fuercen un pacto de última hora, según las mismas fuentes.