jueves, marzo 11, 2010

El PSOE frena una iniciativa parlamentaria para obligar a enseñar los crímenes de Stalin

La izquierda española se sigue retratando. Es comprensible que defiendan lo suyo, aunque sean los genocidios sitemáticos de Stalin, pero en el siglo XXI ya no valen esas tretas y que se disfracen de demócratas. Otro episodio a sumar a los amiguismos con dictaduras latinoamericanas.

Los 7 millones de ucranianos que murieron por la hambruna que provocó Stalin no merecen ser estudiados en los colegios españoles, según se desprende de la negativa del PSOE. Decisión contraria a las resoluciones de la UNESCO, y que EEUU, Canadá, Australia o Argentina sí reconocen como genocidio

Este miércoles, la Comisión de Educación del Congreso de los Diputados rechazaba la proposición no de ley de CIU que instaba al Gobierno a que que "impulse la incorporación a los textos escolares, dentro del sistema educativo autonómico, la información sobre la hambruna en Ucrania de los años 1.930 a 1932" según informa El País.

Jordi Xuclá, el diputado de CiU que defendió la propuesta, aseguraba que había presentado la iniciativa porque "nos mueve la reparación de los tres grandes crímenes del siglo XX: el Holocausto, las hambrunas provocadas por Stalin y las matanzas en Ruanda. Sobre las tres hemos presentado iniciativas, y seguiremos haciéndolo" indicaba.

La hambruna a la que se refiere la moción, ocurrió en Ucrania de 1930 a 1932. Stalin ordenó la colectivización forzosa de una gran dimensión de tierras, y vendió las cosechas a países extranjeros, mientras los campesinos morían de hambre.

El Congreso cifró en más de 7 millones de muertos esta tragedia, aunque algunos cálculos más conservadores lo sitúan en 3,5 millones. Por este motivo, la Unesco redactó una resolución que llamaba a los países miembros a "promover la memoria de la Gran Hambruna, incorporando en los programas educativos y de investigación las informaciones sobre esta tragedia". Países como EEUU, Canadá, Australia, Argentina y Polonia lo han considerado como genocidio, equiparándolo con el Holocausto, el genociodio de Rwanda y el al régimen de terror de los jemeres rojos en Camboya.

Pero no será así en España, gracias al PSOE. El asunto requirió dos votaciones, ya que en la primera se produjo el empate. La moción fue apoyada por CiU, PP y PNV, y rechazada por PSOE, ERC, IU e ICV y la abstención del BNG, que en la segunda vuelta deshizo el empate votando en contra, con los grupos de izquierda.

¿Qué alega el PSOE para justificarlo?. Pues que el Parlamento no debe decidir qué contenidos integran el currículo escolar, sino que es la comunidad educativa la que debe acordar los contenidos, según dijo el representante socialista, Emilio Álvarez  a El País. Jordi Xuclá respondía que debía seguirse la resolución de la Unesco, que instaba a incorporarlo a los planes educativos.

La réplica socialista sostuvo que su grupo y su partido aprueban todas las resoluciones de Naciones Unidas de condena de los crímenes del estalinismo... pero, también se escudaron en las diferente interpretaciones que se dan sobre los hechos y que dividen drásticamente a rusos y ucranios aún en la actualidad.

Los primeros niegan que se tratara de una limpieza étnica; es decir, rechazan que fuera un genocidio, porque la hambruna también dejó un reguero de muerte por otras repúblicas soviéticas. Esta versión centra el objetivo de la represión de Stalin en los "terratenientes". Pero lo historiadores ucranios niegan esta versión, y defienden que la colectivización forzosa no fue sólo contra los dueños de la tierra, sino contra el pueblo.

miércoles, marzo 10, 2010

Diecinueve artistas escriben una carta para convertir a Willy Toledo en una víctima

La gentuza, tarde o temprano, siempre acaba retratándose a si misma. Estos lameculos hipócritas, que cuando les conviene se erigen en únicos defensores de derechos humanos, siempre demuestran su verdadera cara. ¿Cuánto les pagará la dictadura cubana? Mientras en la isla sigue muriendo gente por opinar diferente, ellos siguen apoyando a un régimen con más de 50 años de asesinatos... 

Cabe destacar la presencia de el inefable Luis Tosar como firmante.

Los artistas no dan abasto. En los últimos días han montado una web y un acto de apoyo a Garzón. Ahora, algunos de los habituales abajo firmantes han publicado una carta de apoyo a Willy Toledo, en la que se lamentan de las críticas que reciben desde las "movilizaciones contra la guerra" de Irak.

En la carta, a la que ha tenido acceso elmundo.es, dan una definición de política. “Es todo aquello que concierne a la convivencia: cómo nos organizamos para vivir juntos y a ser posible, en paz. En este sentido, todos somos seres políticos, todos tenemos el derecho y la responsabilidad de participar en la decisión de cómo vivir en comunidad. (…)”.

Realizada esta apreciación pasan a expresar su “más firme apoyo” hacia el actor Willy Toledo, hecho que, a pesar de ser el motivo de su misiva, les lleva a ocupar seis escasas líneas: “Consideramos que nuestro compañero Guillermo Toledo ha sido objeto de una reacción agresiva y desproporcionada en los medios de comunicación por ejercer el derecho ciudadano a participar públicamente del debate político. (…) A nuestro parecer, la reacción contra las declaraciones de Guillermo Toledo se ha convertido, en muchos casos, en una auténtica campaña contra su persona”.

La polémica comenzó cuando Willy Toledo dijo que la gran mayoría de los "presuntos disidentes" encarcelados en Cuba "son terroristas", y que Orlando Zapata "no era más que un delincuente común". Al día siguiente no sólo no rectificó sino que añadió: “Nadie puede demostrar que un solo preso cubano haya sido torturado”.

En esRadio, tuvo un cara a cara con Luis Herrero, donde el periodista intentó sin éxito que rectificase sus comentarios.  Toledo llegó incluso a comparar las cárceles castristas con las españolas. Entonces los sindicatos policiales señalaron que el actor “está para que le encierren”.

Ahora, cuando la polémica parecía apagarse, algunos de los habituales abajo firmantes han publicado una carta para mostrarle su apoyo y, ya de paso, hacer un poco de corporativismo. Y es que la mayor parte de la misiva la utilizan para lamentarse y hacerse los sorprendidos porque los medios de comunicación les critiquen por sus declaraciones y actos partidistas y de partido. Incluso sacan a relucir la guerra de Irak. Pero ni una palabra para el preso cubano muerto, Orlando Zapata.
"Creemos que desde una parte considerable de los medios de comunicación existe un mensaje permanente de rechazo a la implicación política de los ciudadanos que trabajan en el mundo de la cultura. Muy especialmente de los actores, desde su participación en las movilizaciones contra la guerra de 2003. El cine, el teatro, cualquier trabajo creativo, busca, entre otras cosas, reflexionar sobre los conflictos humanos, en las relaciones personales y sociales. La cultura es, en gran parte, el aprendizaje de la convivencia. Hay una lógica, por tanto, en la frecuente implicación política de los ciudadanos que trabajan en este campo. Implicación que no tiene mayor validez, ni menor, que la de cualquier ciudadano, sea cual sea su profesión.
Hacemos una llamada a todos -y a nosotros, los primeros- para intentar recuperar un lenguaje que nos sirva para entendernos, un lenguaje despojado de violencia, que se sustente en los hechos y no en los juicios personales, un lenguaje riguroso y basado en la buena fe, que sirva para trabajar juntos, aunque sea desde distintas ideas, por un mundo mejor".
La carta está firmada tan sólo por 19 artistas, la mayoría de ellos desconocidos: Alberto San Juan, Luis Tosar, Lola Dueñas, Candela Peña, Juan Diego Botto, Raul Arévalo, Antonio de la Torre, Pilar Castro, Víctor García León, Andrés Lima, Javier Gutiérrez, Nancho Novo, Carmen Ruiz, Sergio Peris Mencheta, Secun de la Rosa, Inma Cuesta, Diego París, Alfonso Lara, Roberto Alamo, Luis Bermejo, María Morales, Luz Valdenebro, Estefanía de los Santos, Eleazar Ortiz, Aitor Merino, Laura Ramos, Ramiro Alonso, Sandra Collantes, Font García Rodríguez, Manuel Baqueiro e Inma Montalá.