domingo, julio 29, 2007

El Gobierno ocultó que el barco hundido en Ibiza contiene residuos "altamente tóxicos"

El buque mercante, hundido a la entrada del puerto de Ibiza desde el pasado 11 de julio de 2007, transportaba un cargamento de 15 toneladas de baterías de automóvil, consideradas residuos "peligrosos" por la Unión Europea, según publica este domingo La Gaceta. El cargamento, altamente tóxico por su contenido en plomo y ácido sulfúrico, no fue desvelado hasta este viernes por la consejera de Interior del Gobierno balear.

María Ángeles Leciñena, consejera de Interior del Gobierno balear, apuntó este viernes que los equipos de inmersión descubrieron la carga el miércoles. Leciñena no ha aclarado porqué se dio a conocer la noticia de la toxicidad del cargamento dos días después.

Sin embargo, la empresa Iscomar, propietaria del buque, insiste en que todo el contenido del "Don Pedro" estaba correctamente inventariado y que era conocido por todas las instituciones. Fuentes de la empresa han precisado que se trata de "baterías agotadas" que se llevaban a la península para su reciclaje.

Tras conocer la noticia, según La Gaceta, la organización ecologista Greenpeace ha pedido al Gobierno balear como al Ministerio de Medio Ambiente que "aclaren públicamente desde cuándo tenían conocimiento de la carga peligrosa del buque Don Pedro y cuál era el destino de la misma". Greenpeace también ha declarado que está preparando una nueva denuncia contra la empresa Iscomar "por ocultar el traslado de toneladas de residuos de baterías de automóviles" y que el transporte de estos residuos, considerados por la UE como "peligrosos", incurre en un incumplimiento de la Directiva 2000/53 de la Comunidad Europea relativa a los "vehículos al final de su vida útil, que exige a los gobierno el control estricto del almacenamiento y tratamiento" de los mismos.

Greenpeace ha incidido en la repercusión del plomo, un metal pesado altamente tóxico, en la fauna y vegetación marina, porque tiene una "gran persistencia en el medio ambiente".

Por su parte, desde WWF/Adena se ha expresado sorpresa por el hecho de que no se hubiera informado de la presencia de estos materiales "altamente contaminantes". También se ha insistido en la necesidad de reflotar el buque, ya que su carga junto con otros elementos, como la pintura, suponen "un punto de contaminación" para la zona.