Un cargo de ERC amenaza a clubes de fútbol por no ceder jugadoras a la selección catalana

El coordinador territorial institucional de la Secretaria de l'Esport, Jordi Eduardo (ERC), amenazó a los ayuntamientos barceloneses de Rubí y Esplugues de Llobregat con reducirles las subvenciones como castigo por no ceder a algunas de sus jugadoras a la selección catalana, que competía la semana pasada en el Mundial de fútbol sala celebrado en Reus.

Según ha avanzado 'El Periódico' y han confirmado fuentes del ayuntamiento de Rubí a elmundo.es, Eduardo pretendía que el Rubí aplazase su encuentro contra el Castelldefels, en la categoría de segunda división nacional, para que las jugadoras pudiesen sumarse a la selección catalana.

El cargo republicano llamó al concejal de Deportes de Rubí, Josep Antoni Serra (PSC), para reclamarle este cambio en el calendario, pero, tras consultarlo con la Federación Española y recibir una negativa como respuesta a riesgo de recibir una sanción, Serra comunicó a Eduardo que el cambio no sería posible y que las jugadoras no podrían ser cedidas.

Fue entonces cuando el cargo de Esquerra en la Secretaria de l'Esport envió un mensaje al concejal de Deportes de Rubí diciendo que su departamento "sabrá entender que Rubí no colabora" en sus proyectos. "Por tanto 'quit' sic) pro quo".

Según el concejal de Rubí, la AE Penya Esplugues recibió presiones similares del mismo cargo para ceder a sus jugadoras.

La selección catalana participó tras ser aceptada por la Asociación Mundial de Futsal -organización distinta a la FIFA- y se hizo con el campeonato imponiéndose a Galicia en la final.

El PP habla de 'prácticas mafiosas'
Al respecto, el presidente del PP en el Parlament, Daniel Sirera, ha criticado las "prácticas mafiosas" de los responsables del área de Deportes de la Generalitat. Ha preguntado a Carod si comparte estos métodos y, en caso de que no se así, "tome las medidas necesarias y lo cese (a Eduardo) para que unos hechos de esta gravedad no se vuelvan a repetir".

Para Sirera, es "intolerable" que se produzcan presiones, pues los clubes son "entidades privadas con autonomía para decidir si envía jugadores a las selecciones catalanas". Subrayó que ERC no puede trasladar al Govern su deseo de impulsar las selecciones catalanas "utilizando los cargos públicos como comisarios políticos".