Prosigue el intento del socialismo más reaccionario de ganar una guerra que ellos mismos perdieron hace 70 años... ¿y para qué? Para ganarse el voto de la extrema izquierda. Mientras España se desangra con el paro, ellos sólo piensan en cosas del pasado... así nos va.
Zapatero reparte ese dinero entre organizaciones afines para exhumar cadáveres y expandir socialismo y sindicalismo. Él mismo es vocal de una fundación 'agraciada'.
Más dinero público para exhumar cadáveres de la Guerra Civil y organizar jornadas y realizar documentales y películas que revivan una contienda que partió en dos España y que acabó hace ahora setenta años. El Gobierno publicó ayer en el BOE la lista de beneficiarios para 2009 de las subvenciones “destinadas a actividades relacionadas con las víctimas de la guerra civil y del franquismo”, que suman casi cuatro millones de euros y alrededor de 200 proyectos. Lo primero que llama la atención es que la cifra total destinada a esta partida es casi idéntica a la del año pasado, cuando fueron 3,9 millones de euros. Eso significa que, pese a la crisis que azota el mundo en general y España en particular, el Gobierno no ha querido reducir el gasto de esta partida.
Al margen de esto, un análisis de esa lista de beneficiarios rebela que sindicatos y fundaciones afines a los ideales socialistas son los principales agraciados. Por ejemplo, el sindicato UGT, tradicionalmente ligado al PSOE y que el próximo día 12 va a protagonizar una huelga contra los empresarios con el aplauso del Gobierno.
UGT recibe directamente dinero gracias a esta ley. Así, la UGT de Madrid tendrá 18.500 euros para “Resistencia sindical en Madrid: Historia de vida de militantes de UGT durante el franquismo”. Esta ayuda es complementaria de la que recibió ya el año pasado por el mismo concepto y que fue de 30.000 euros. En total, por tanto, casi 50.000 euros en dos años para contar historias de resistencia de sindicalistas al franquismo.
Fundaciones
Pero, además de recibir dinero de manera directa, también suman subvenciones fundaciones del propio sindicato. Es el caso de la Fundación Progreso y Cultura, que preside José Ricardo Martínez Castro, responsable de UGT Madrid. Esta fundación ha recibido otros casi 55.000 euros en los dos últimos años para contar historias de aviadores de la República en la Guerra Civil española.
Otro caso es la Fundación Francisco Largo Caballero, vinculada a UGT y donde el jefe de este sindicato, Cándido Méndez, es uno de los vocales del patronato.
Los proyectos por los que esta fundación ha recibido en los dos últimos años casi 140.000 euros son realizar el archivo oral del sindicalismo socialista y un seminario sobre Correos en la España de Franco.
Otros dos sindicatos, Comisiones Obreras y la Confederación General del Trabajo (CGT), también son subvencionados directamente o a través de fundaciones afines por esta partida. Por ejemplo, 25.000 euros para la Federación de Enseñanza de CC OO, o 18.000 euros para la Fundación 10 de marzo, adscrita a CC OO Galicia.
Ministros
Además de a los sindicatos y fundaciones adscritas a ellos, el Gobierno reparte importantes cantidades de dinero entre organismos cercanos a su propio partido. Tan cercanos al PSOE que incluso destacadas figuras socialistas son presidentes de esas fundaciones o figuran entre los vocales que forman el patronato.
Es el caso de Alfonso Guerra y la Fundación Pablo Iglesias, fundador del PSOE. Este organismo aparece este año entre la lista de beneficiarios con 24.000 euros. El proyecto es “Memoria Histórica del socialismo español”.
En el patronato de esta fundación están ministros como José Blanco o Carmen Chacón, responsables de sindicatos como Cándido Méndez, de UGT, el presidente de la Comisión Nacional de Competencia, Luis Berenguer, y el propio José Luis Rodríguez Zapatero. Insólito.
Pero no es el único caso. En esta fundación también figura como vocal Manuel Chaves. El ex presidente de la Junta de Andalucía es el presidente de honor de otra fundación que va a recibir 34.000 euros este año por un documental sobre exiliados: la Ramón Rubial-Españoles por el Mundo.
El año pasado ya consiguió una subvención de 40.000 euros para recoger testimonios sobre exiliados. Entre los vocales que forman parte del patronato de esta fundación repite Luis Berenguer, presidente de la Comisión Nacional de Competencia, y aparece Pedro Zerolo, miembro de la ejecutiva del PSOE.
Nacionalistas
Hay más sorpresas entre los beneficiarios. Por primera vez, este año también habrá un pellizco para la Fundación Sabino Arana. Será un total de ocho mil euros para “Evacuación y emigración vasca. Identificación de exiliados”. No hay que olvidar que Sabino Arana es el padre del nacionalismo vasco y que entre sus ideales se encuentran frases como “habéis mezclado vuestra sangre con la española o maketa, os habéis hermanado con la raza más vil y despreciable de toda Europa”.
También va a recibir siete mil euros la Fundación Idi Ezkerra, para un ciclo de conferencias titulado “Los Caminos de la Memoria”. Esta organización la preside Antton Karrera, miembro de ETA durante el franquismo que luego engrosó en las filas de Izquierda Unida en el Pais Vasco, siendo su máximo responsable en Guipúzcoa.
jueves, diciembre 03, 2009
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1 comentario:
Tengo 64 años. Lo que me enseñaron en la escuela sobre nuestra Guerra Civil, fue una versión favorecedora del régimen del general Franco. La asignatura se llamaba pomposamente "Formación del Espíritu Nacional" y les aseguro que quedé harto de aquella asignatura.
Aunque mi abuelo era seguidor del dictador Primo de Rivera,el resto de mi familia, mi padre y mis tíos estaban en el frente del bando republicano y el resto en la retaguardia.
La visión que adquirí de aquella confrontación era de que los Nacionales eran los "malos" y los republicanos - sin distinción - eran los "buenos".
Ha hecho falta que transcurrieran muchos años para darme cuenta del mal enfoque que hice. En aquella guerra perdió el bando repúblicano pero también perdió la otra España, la conservadora: una guerra civil es desastrosa para la generación que la sufre y tiene malas consecuencias para futuras generaciones.
He tenido que leer un libro de casi dos mil páginas escrito por el historiador inglés Huge Thomas, para sacar mis propias conclusiones y son tan complejas que todavía no puedo decantarme hacia ningún bando. Los nacionales tenían el apoyo del Eje Berlín-Roma, pero la República estaba en manos de anarquistas y comunistas. Como estos últimos tenían mejor organización, Stalin estuvo a punto de plantar una bandera roja en medio de la Península Ibérica.
Despúes de ensayar en España lo que sería la 2ª Guerra Mundial...ustedes mismos juzguen.
La Guerra Nuestra, debe ser materia de historiadores y no negocio de políticos sin escrúpulos.
¡Qué dejen en paz a los muertos y que pongan el dinero y la energía para potenciar el trabajo.
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